Aeropuertos de Roma: el futuro del control fronterizo ya es una realidad 

Aeropuertos estratégicos, desafíos complejos 

El Aeropuerto Internacional "Leonardo da Vinci" de Fiumicino y el aeropuerto "G.B. Pastine" de Ciampino son dos polos fundamentales para el tráfico de pasajeros desde y hacia la capital italiana. Fiumicino es el mayor hub aeroportuario nacional y uno de los primeros de Europa en tráfico internacional, mientras que Ciampino desempeña un papel crucial en los enlaces civiles, gubernamentales y militares. En ambos casos, la eficiencia en los controles fronterizos es esencial para garantizar seguridad, rapidez y una buena experiencia de viaje.

En el contexto europeo, estos aeropuertos también son puntos de entrada al espacio Schengen: la adopción de herramientas tecnológicas conformes a los estándares de Frontex es estratégica no solo para la gestión de los flujos, sino también para la cooperación internacional en materia de seguridad e identidad digital. 

Controles más rápidos sin renunciar a la seguridad

Nuestro equipo experto en Smart Security y Smart Tourism, por su larga experiencia Para mejorar la eficiencia operativa y hacer más fluido el tránsito de pasajeros, el Ministerio del Interior introdujo una nueva normativa que permite a los ciudadanos italianos acceder a los controles automatizados utilizando el Documento de Identidad Electrónico (CIE), siempre que sea válido para viajar al extranjero y emitido después del 7 de febrero de 2018. Un cambio que, para implementarse, requirió una profunda intervención en la infraestructura tecnológica y en los sistemas de control, garantizando una plena integración con las bases de datos del Ministerio, seguridad biométrica avanzada y conformidad con los estándares europeos definidos por Frontex.

Minsait, empresa del grupo Indra, fue la primera entidad tecnológica en Italia en acoger e implementar las nuevas disposiciones ministeriales, diseñando e instalando:

• 15 eGates inteligentes en la galería de tránsito del aeropuerto "Leonardo da Vinci" de Fiumicino
• 11 eGates en el aeropuerto "G.B. Pastine" de Ciampino

El corazón de la solución es un software avanzado desarrollado internamente por Minsait, capaz de gestionar:

• Controles sintácticos: verificación de autenticidad del documento y cruce en tiempo real con la base de datos del Ministerio del Interior
• Controles semánticos: identificación biométrica mediante reconocimiento facial y huellas dactilares para los ciudadanos italianos

Esta realización representa una primicia a nivel nacional, tanto desde el punto de vista tecnológico como normativo: es la primera vez que el CIE se utiliza a gran escala para acceder a controles automatizados en un entorno aeroportuario.

El proyecto ha generado beneficios relevantes y medibles desde los primeros días de funcionamiento:

• En Ciampino, en la primera semana de activación, el 15 % de los accesos mediante eGates se realizaron con el CIE
• Reducción significativa de los tiempos de espera para los viajeros italianos
• Optimización del trabajo de la Policía de Fronteras, gracias a una mejor gestión de los flujos y de las excepciones
• Mayor confort para los pasajeros, que ahora pueden completar los controles en pocos segundos
• Mayor seguridad general, gracias a la combinación de tecnologías biométricas y verificaciones conectadas a bases de datos oficiales

Una demostración concreta de innovación con impacto

Este caso de éxito confirma a Minsait como un socio de referencia para la transformación digital de las infraestructuras críticas. En particular, hemos demostrado:

• Capacidad de respuesta rápida ante nuevos escenarios normativos
• Liderazgo tecnológico en la gestión de identidad digital y en sistemas biométricos
• Excelencia en la integración de sistemas complejos en entornos altamente regulados y con gran afluencia
• Visión centrada en el ciudadano, orientada a mejorar su experiencia sin comprometer la seguridad

Los eGates activados en Fiumicino y Ciampino marcan un punto de inflexión para el ecosistema aeroportuario italiano y representan un modelo replicable en otros países. Un ejemplo concreto de cómo tecnología, normativa y servicio al ciudadano pueden converger en soluciones que mejoran la vida de las personas.